DIARIO PERÚ PRIMERO

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Director: Humbert Romero Verano.

jueves, 28 de noviembre de 2013

Poder Judicial y Fiscalía culpables del hambre de emblemática azucarera Andahuasi

¿Hasta cuándo?
  •   En medio de indiferencia de los llamados “padres de la patria”

Escribe: Humbert Romero Verano
Tanto el Poder Judicial como el Ministerio Público son dos instituciones del Estado que siguen actuando mecánica y fríamente, sin importarles el bienestar social del pueblo, tal como estamos viendo en estos últimos tiempos. De esto no hay duda alguna.
Y un claro ejemplo de ello es lo que está padeciendo en carne propia los familiares y socios-trabajadores de la conocida azucarera Andahuasi, que reclaman el levantamiento de la inmovilización de ingentes lotes de azúcar, para que puedan ser negociados y sirva así de sustento a los cientos de hogares que conforman la gran familia andahuasina, según se desprende de los últimos reportes logrados por Perú Primero.
Los jueces, más que los fiscales, han buscado mil pretextos para no resolver el justo petitorio de los quejosos por medio de sus abogados, con la exclusiva finalidad de que los andahuasinos tengan una fuente directa de ingresos que les permita paliar el hambre de sus hijos y cumplir con el gasto mínimo que demandan los menesteres caseros.

Sin embargo, nada de ello ha ocurrido desde hace varias semanas, a lo que se agregan las excusas de los magistrados en general para no resolver el pedido expreso de los andahuasinos, las mismas que han resultado hasta risibles, por decir lo menos, por lo burdo e írrito que resultan; por ejemplo, que las autoridades jurisdiccionales aleguen no poder ocuparse respecto a la solicitud de los excooperativistas, porque han estado cumpliendo una medida de “brazos caídos” , a fin de que el Ejecutivo disponga la partida económica del caso para que sus sueldos sean nivelados en todo el país. Y por cierto que esa especie de “huelga blanca” de los jueces no será sancionada con los descuentos que, para cualquier empleado público, se tiene que aplicar con rigor, por más que su medida de fuerza fuese razonable.
Entonces, bajo esa perspectiva, nos encontramos que a los señores magistrados no les importa un comino hacer lo que están obligados por ley a cumplir: administrar justicia. ¿A dónde acá con esa cantaleta llamada “brazos caídos”?, que es atentatorio definitivamente contra el principio expreso que ellos mismos lo saben y conocen: No pueden desatender sus despachos por reclamar aumentos o nivelación de escalas remunerativas. No obstante ello, estas malas autoridades judiciales antepusieron sus ambiciones crematísticas en lugar de darse un lapso para resolver las causas pendientes, una de ellas –claro está- la relacionada al petitorio de Andahuasi para que se elimine la prohibición existente para que dicha empresa venda sin problema alguno el azúcar producto del fruto del trabajo de cientos de hombres y mujeres del emporio azucarero, uno de los más importantes del país.
MARCHA PACÍFICA
En esa línea, los socio-trabajadores de Andahuasi realizaron hace unos días una marcha pacífica pero elocuente respecto al pedido hecho a la justicia para que ponga fin a la prohibición impuesta para que dicha azucarera venda el azúcar a terceros. “No es posible que nos castiguen con esa incautación por orden judicial, porque de esa manera se está robando la educación y alimentación de nuestros hijos y familias; necesitamos que esta azúcar se venda para poder subsistir. ¿O acaso los magistrados no son seres inhumanos y desconocen lo que es el hambre y la necesidad?”, reclamó un dirigente sindical que prefirió el anonimato por ahora.
Es de resaltarse también que pocas autoridades han expresado su solidaridad en torno al vía crucis que vive el pueblo andahuasino, entre ellos el alcalde distrital de Sayán, Víctor Esteban Aquino, quien demostró de esa manera su sensibilidad social y deseos para que el Poder Judicial no siga demorando el respectivo fallo respecto al manejo del azúcar como producto y comercialización a cargo de la misma azucarera, como antes siempre se hizo sin trabas de nadie.
Si bien, de la misma manera, el pueblo de Sayán dio su respaldo en las calles a los servidores de Andahuasi respecto a la lucha planteada para recobrar su derecho a lograr las utilidades de ley con la venta de la sacarosa, los denominados “padres de la patria” no han dicho esta boca es mía, de manera especial los que dicen representar a los intereses de Huaura.

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